Los más destacados son:


Monumento a Nicolás Levalle

Fue realizado por el artista local Rodolfo Pedro «Pichón» Gómez Fernández con un procedimiento inventado por él. Los materiales usados son fibra de vidrio y resinas de poliéster policromadas que lo hacen único. La representación muestra en lo alto a Levalle a caballo y en la base, personajes típicos de la época (maestra, herrero, soldado e indio) y dos bajorrelieves con escenas de fines del siglo XIX (el malón y el Fuerte General Belgrano). Bajo el monumento, de 5 metros de altura, están depositadas las cenizas del autor. Está ubicado en el centro de la Plaza homónima y fue inaugurado en 1978.


Monumento a San Martín

La estatua en bronce del Libertador, fue obra del escultor señor P. Vian, y fue fundida en los talleres Sarubbi y Barile de la Capital Federal. El pedestal, que tiene dos metros sesenta de altura (igual que la estatua), fue construido totalmente en granito puro, color rojo dragón y su diseño artístico correspondió a la arquitecta Noemí Fasolo. Se inauguró en 1957 en ocasión de cumplirse el centésimo séptimo aniversario de la muerte del prócer. Está situado en la intersección de las calles San Martín y Mitre.


Estatua de Ana

Estatua de cemento que representa a un desnudo femenino sentado. Está emplazada, desde 1982, en la Plaza Levalle y su autor es la artista plástica local Alicia Fino (ver también en Escultura).


Estatua El Ángel Vigía

Escultura hecha en Italia y ubicada en la cumbre de una bóveda del «Viejo Cementerio». Pesa 800 kg y está esculpido en un solo bloque de mármol de Carrara. Al inundarse el cementerio la estatua quedó bajo las aguas del Lago Epecuén siendo rescatado en 1996 por los Bomberos Voluntarios locales y ubicado definitivamente en el predio de esta institución.


Monumento a la Madre

El día 18 de octubre de 1964 quedó inaugurado, en un ángulo de la Plaza Levalle, el Monumento a la Madre, obra del escultor Ángel Muñiz Alique de Bahía Blanca. Está conformado por una madre y tres niños y su estructura posee una armazón de hierro y un relleno de cemento blanco revestido por una imitación de piedra fundida.


Cristo del Lago

El Cristo del Lago en las Termas de Carhué, fue emplazado en 1937, durante la gestión del Comisionado Municipal Juan Marcalain. El costo fue donado por su esposa Sra. Argentina de la F. De Marcalain y obsequiado a la ciudad para ser emplazado en el camino a Epecuén y al viejo cementerio.